Explota las debilidades de las grandes superficies y mejora tu negocio

Explota las debilidades de las grandes superficies y mejora tu negocio
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Si en la década de los 90 y el 2000 vimos como el flujo de clientes se iba hacia las afueras, donde están tradicionalmente las grandes superficies y los centros comerciales, el comercio minorista ha conseguido un nivel de especialización y una base de clientes fidelizados tan importante, que ahora son estas grandes superficies las que están trasladándose otra vez al centro de las ciudades.

Tanto que incluso plataformas como Carrefour han tenido que crear su variante Carrefour Express o el caso de Hipercor, que ha sido absorbido dentro del El Corte Inglés. Estrategias que pasan a la ofensiva porque no pueden competir con la cercanía que da el servicio de un comercio pequeño de barrio. Hoy te vamos a enseñar algunas claves para explotar las debilidades de los grandes comercios:

  • El tamaño es un problema: La gestión de cualquier empresa se vuelve más complicada cuanto más grande es. A diario vemos errores en grandes superficies que tienen un coste millonario para sus dueños, los pequeños comercios tienen la capacidad de gestionar sus operaciones comerciales de forma sencilla y con bajos costes. 
  • Internacionalización: Crecer a nivel geográfico no es fácil, una tienda local conoce a sus clientes, sus calles, las ciudades de al lado y sabe de primera mano las necesidades de la zona o las costumbres locales. Es más sencillo que un pequeño empresario abra otra tienda que para una empresa global entrar en un nuevo mercado. 
  • Especialización: Sin duda alguna, la especialización es una de las claves por las que el comercio minorista sigue cosechando muy buenas cifras. Puede que comprar por internet sea cómodo, pero cuando alguien necesita ayuda y el consejo de un especialista siempre suele recurrir a su tienda de confianza, esto es algo que un gigante por internet nunca conseguirá porque tiene tantos empleados que nunca te atiende el mismo.

En tu panadería de siempre los trabajadores saben qué necesitas, si tu escritor favorito saca un nuevo libro tu librero te avisará porque conoce tus gustos, y esto es algo que sólo se consigue con un trato personal y directo a lo largo de los años.