2017 está siendo un año especialmente duro para los negocios tradicionales y el pequeño comercio, los cambios de hábitos de consumo de la sociedad están afectando incluso a franquicias que han disfrutado del éxito, en el más amplio sentido de la palabra, durante más de una década.
Día tras día escuchamos noticias sobre como tiendas de videojuegos, negocios de decoración, carnicerías o panaderías cierran sin que nadie ponga remedio…
Si tienes un pequeño negocio y quieres mantener unos ingresos estables a medio y largo plazo, te recomendamos que diversifiques tus inversiones e intentes ampliar las fuentes de ingresos. Del mismo modo que las tiendas de videojuegos ahora venden artículos de coleccionismo, cómics o accesorios, ¿por qué no ampliar la oferta de productos de nuestra panadería?
Hacer cambios en un negocio siempre da miedo. La incertidumbre sobre el resultado y la inversión económica son dos factores importantes que echan para atrás a muchas personas. Pero, ¿qué podemos hacer sino, para adaptarnos al mercado?
Una buena opción para una panadería está en especializarse. Aquí no hablamos de incluir artículos de repostería, que sería lo más sencillo, sino de abarcar un mercado que está en auge y muy poco explotado. ¿Por qué no empiezas a ofrecer pan y derivados para personas con alguna intolerancia, celíacos y veganos?
La dieta vegana o sin gluten está de moda y muchas de las personas que la consumen no tienen problemas de tolerancia frente a harinas de maíz o el trigo. Esto hace que el target potencial sea mucho más grande que el de hace 10 años cuando casi no se hablaba de este tema.
Otra de las opciones para mejorar la experiencia de comprar en nuestro negocio está en instalar un sistema de cobro automático como Cashlogy, que coge y devuelve el dinero exacto de cada compra. De esta forma se reduce el tiempo que los empleados tienen que estar en caja, añadiendo flexibilidad a su jornada.