Seguramente te haya pasado alguna vez que estés andando por una calle por la que pases a diario y veas que constantemente se abren y cierran negocios del mismo tipo. Si 4 tiendas de ropa han fracasado en la misma zona, ¿qué le hace pensar al quinto que lo intenta que la suya va a triunfar?
La consultora Prensa y Comunicación ha realizado un estudio donde refleja que el 90% de las personas que crean un negocio destinan menos del 5% de su presupuesto al marketing. Un error de principiante que es la causa de que todos estos negocios ya empiecen con mal pie y no duren mucho tiempo abiertos.
Cuando hablamos de marketing no nos referimos sólo a el apartado de la publicidad, el mundo del marketing es mucho más amplio y complejo. Cuando vamos a abrir un negocio, antes incluso de diseñar el concepto, tenemos que realizar una serie de pasos extremadamente importantes:
1. Haz un estudio de mercado: ¿Qué puedes aportar tú que no hayan ofrecido otros? ¿Has analizado la competencia de la zona? ¿Qué tipo de clientes viven en esa zona?
2. Reserva bastante dinero para la publicidad: No se trata de que tu pequeño negocio tenga que salir en TV, sino de que hoy en día sin publicidad no se llega a ninguna parte. Realiza promociones, presentaciones, reparte flyers junto con café gratis, apúntate a asociaciones de comerciantes de la zona o preséntate a otros negocios y crea alianzas estratégicas.
3. Haz eventos de presentación: Nadie va a ir a tu tienda si no tiene interés (o formas parte de una marca o franquicia que ya tiene un nombre en el sector). Haz una inauguración e invita a los vecinos de la zona, contrata a un servicio de catering y ofrece comida y bebida a los viandantes que pasen por la zona y entren a conocer tu tienda. La originalidad se traduce en un aumento del interés.
4. Introduce un sistema de fidelización: Crea un sistema que recompense a los clientes fijos que suelen visitar tu negocio con frecuencia. Ofrece descuentos, muestra gratuitas, realiza sorteos, crea fichas de clientes con su fecha de cumpleaños y datos de interés. Cuidar la experiencia del cliente es vital para que sigan viniendo a tu tienda.