Que el turismo y la hostelería son dos de los motores más importantes de la economía española no es precisamente ningún secreto.Pero los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) confirman que siguen siendo sectores fiables y que tienden a romper las expectativas de los inversores.
Acabamos de conocer que la cifra de negocios de la hostelería ha superado todas las previsiones creciendo un 4,2% interanual, una cifra que sorprende tras la contención de llegadas de turistas extranjeros pero que confirma que es un sector con una capacidad dinámica envidiable.
Algunos de los datos más importantes que vemos es una caída del 8% en las pernoctaciones de abril del año pasado, pero que progresivamente se ha ido recuperando hasta superar el 3,3% interanual. No obstante, la restauración se ha beneficiado de picos mucho más leves y solo cayó un 0,5%, para volver rápidamente hasta la senda del crecimiento y superar el 4,5% respecto al año pasado.
El sector servicios supone una muy importante partida del total de los ingresos que recibe el Estado español, mientras que su salud es también vital para millones de familias que dependen de él ya sea de forma directa o indirecta. No podemos olvidar que, a pesar de la globalización, en nuestro país hay una gran cantidad de restaurantes y pequeños alojamientos que son propiedad de familias y no de cadenas corporativas.
Todavía es temprano para predecir lo que ocurrirá durante la campaña de verano, pero si la tendencia sigue como hasta ahora, podemos estar tranquilos porque el panorama es de lo más alentador.