Hay errores que se solucionan rápidamente y errores que provocan el cierre de un negocio . La gestión empresarial y el mantenimiento activo de un negocio esconden una complejidad que no todo el mundo está preparado para asumir. Todas las decisiones que se toman tienen un efecto inmediato tanto en el rumbo de la empresa como en la vida de los trabajadores que la conforman.
Una gran idea y un negocio asentado pueden desmoronarse en muy poco tiempo si se toman decisiones poco adecuadas y no se reacciona a tiempo. Descubre los errores más comunes que hacen fracasar a un negocio :
1. Tiempo de reacción excesivo : Cuando aparecen factores que afectan negativamente a la actividad de un negocio , como puede ser el aumento de la competencia , incertidumbre política, deterioro de la economía local , problemas de stock (ver el caos generado por el Canal de Suez o la escasez de microchips a nivel mundial) es de vital importancia que estudiemos una estrategia y apliquemos diferentes medidas de forma inmediata. Reaccionar tarde hace que en la mayoría de las ocasiones el daño sea demasiado grave para poder repararlo.
2. Traspaso generacional (familia) : En los pequeños negocios y los negocios familiares es importante dar el paso adecuado y rechazar la idea de que el cambio generacional de la familia debe ir a la par que el de un negocio. Grandes multinacionales familiares como Samsung han confiado la dirección de la empresa en directivos expertos ajenos a la familia. El traspaso de un negocio dentro de la familia solo debe hacerse cuando exista la experiencia necesaria.
3. Mala localización y desconocimiento del público objetivo: Muchas personas no realizan un estudio de mercado completo antes de montar un negocio. ¿Hay negocios similares en la zona? ¿Por qué cierran los negocios en esa zona? ¿Cuál es el público objetivo del negocio? No hacer estas preguntas junto con la elección de una mala localización son errores que se pagan caro.
4. Marketing mal enfocado : No todos los anuncios llegan al mismo público ni todos los canales tienen el mismo alcance. Cada edad consume contenido en canales diferentes , al igual que las redes sociales están cada vez más fragmentadas según la edad. Las personas de 40-60 prefieren la televisión, radio y aplicaciones como Facebook, mientras que los jóvenes de 15-35 prefieren el streaming de vídeo y música y aplicaciones como Instagram o TikTok. Gastar dinero en los canales erróneos disparará el gasto y dañará las cuentas del negocio.