Categoría: Pequeño comercio
El pequeño comercio está viviendo una época difícil por la situación mundial en la que nos encontramos debido a la alerta sanitaria, un bache que contrasta con las cifras que estábamos viendo pre-pandemia. Antes de los confinamientos y las restricciones llevábamos experimentando varios trimestres al alza en los que ya se dibujaba una clara tendencia de los clientes volviendo al comercio local para realizar sus compras.
Mientras seguimos luchando en una de las situaciones más surrealistas que hemos vivido en la era moderna, hoy os presentamos diferentes problemas a los que se enfrenta el pequeño comercio y sus posibles soluciones:
- Cambios en los hábitos de consumo: Los consumidores han evolucionado a pasos agigantados durante las últimas dos décadas e incluso los adultos de 50, 60 o 70 años han cambiado su forma de consumir. Situaciones como la pandemia provocada por el Covid-19 ha hecho que soluciones como los cajones de cobro automático sean un plus muy valorado en el comercio.
Evitar colas, reducir el contacto humano o el traspaso de dinero en efectivo de mano en mano, acelerar el tiempo que pasamos en la tienda… La tranquilidad que aporta Cashlogy a una tienda se traduce en clientes más satisfechos y en una mejor experiencia global. - Rechazar las ventas digitales: La digitalización de las ventas es una de las formas más sencillas de compensar la caída de los ingresos por venta física. En situaciones como la actual se ha demostrado que los comercios que tienen un canal de venta digital son menos vulnerables a situaciones problemáticas como los cierres perimetrales, los controles de aforo o la reducción del horario comercial.
A día de hoy no hace falta crear una tienda online (con los costes que ello conlleva), sino que ya existen multitud de plataformas y apps móviles que prestan su infraestructura y base de clientes a cambio de una comisión de servicio.
3. Stock poco actualizado: Una realidad del mercado que nadie puede negar es que las pequeñas tiendas de barrio no tienen la capacidad logística, tampoco sus proveedores, de actualizar el stock de forma tan rápida como un gigante de internet.
El consumidor es inteligente y generalmente entiende las limitaciones que tiene el comercio local, el problema viene cuando la tienda no se adapta a los tiempos que corren. Ya no basta con actualizar el stock cada 1-2 meses según la temporada, el consumidor de hoy es más exigente y el ritmo acelerado de la sociedad también se ha trasladado a nuestro patrón de consumo.
¿Qué opinas de este tema? ¿Se te ocurren más problemas comunes del comercio local?