Esta semana la noticia de que la Policía Nacional ha detenido a 20 ladrones especializados en alunizajes ha acaparado portadas en todos los medios nacionales. Y es que, no se trata ya de los más de 30 robos que se les imputan, sino que la sensación de inseguridad no deja de aumentar entre los autónomos y los trabajadores.
En este caso la banda estaba acumulado más de 700.000€ en teléfonos robados, una cifra que sorprende pero que impacta más si tenemos en cuenta que los asaltos fueron organizados por toda la orografía española y dejando claro que los delincuentes son gente con amplios conocimientos de la materia.
Pero ¿por qué fue tan fácil para estas personas entrar en los comercios y robar los artículos sin que nadie lo impidiese?
El principal problema es que la mayoría de pequeños comercios no tienen la seguridad suficiente para evitar los robos a gran escala. Una simple cámara de vigilancia no disuade a las bandas organizadas, que son capaces de asaltar un comercio en pocos segundos y desaparecer antes de que respondan los servicios de policía o seguridad privada de la zona.
Las normas de seguridad para evitar robos son sencillas y el coste no es alto. La clave está en combinar varios elementos de seguridad para conseguir una protección eficaz, por ejemplo: cámaras de seguridad, cristal blindado para la puerta o escaparate, rejas de seguridad, doble puerta de acceso, habitación del pánico o sistemas de cobro automático como Cashlogy.
Al final del día, lo más importante es garantizar la seguridad de los trabajadores, de los clientes y tu negocio.