No te conformes, la primera regla de un negocio con éxito es que siempre hay margen para mejorar. Invierte en calidad, en avances tecnológicos, en mejorar la logística, el trato a tus clientes, en eficiencia energética, mejora la calidad de vida de tus trabajadores. Convertir un negocio simple en una experiencia no es sencillo, pero el resultado es maravilloso.
Consejos para transformar tu negocio:
– Vende un estilo de vida: La mejor forma de asegurar que los ingresos se mantengan de forma estable es conseguir vender no un producto, sino un estilo de vida. Si enfocas tu estrategia a largo plazo, haciendo hincapié entre tus clientes de que ese producto o servicio tiene que ser consumido de forma regular para conseguir X beneficios, el retorno será espectacular.
¿Por qué si no las empresas de alimentación utilizan eslóganes de consume tal o cual cantidad a la semana si quieres mejorar?
– Asocia tu marca a valores positivos: Los adjetivos eco, verde y saludable no se usan a la ligera. Si asocias tu marca con tareas tipo reciclaje, consumo responsable, eficiencia energética, apoyo a la comunidad, tolerancia, origen controlado o no testado en animales (cruelty free), harás que mucha gente compre en tu tienda o compren tus productos por el simple hecho de que moralmente solo consumen de empresas con valores.
– Invierte en innovación: Introduce cosas fuera de lo común, no te quedes atrás y olvídate de “si lleva 30 años funcionando mejor no cambiar nada”. El mundo evoluciona, la globalización y la tecnología son implacables, y a lo mejor no debes cambiar tu proceso de producción porque es estupendo, pero sí puedes introducir nuevos métodos de cobro como Cashlogy para reducir las colas, o puedes comenzar a exportar tus productos para aumentar tus ingresos.
Un ejemplo muy claro son las empresas de dulces navideños. Gracias a las ventas por internet y a la exportación han conseguido que un negocio estacional se mantenga durante todo el año.