Ante momentos de inestabilidad política, incertidumbre económica o poca rentabilidad de sectores tradicionales como la bolsa o los depósitos bancarios, es muy común invertir dinero líquido en productos y materias primas como el café, cuyo consumo se mantiene estable y la demanda aumenta año a año.
El mercado de Estados Unidos está que echa fuego, esta misma semana hemos visto como los contratos a futuro de café están subiendo con fuerza como respuesta a la guerra comercial entre Estados Unidos, China y los problemas que hay en Venezuela entre otros.
Cada contrato de futuros de café tiene una media de 37.500 libras de café, y si para mayo los veíamos a un precio mínimo de 92,70$ en septiembre no los encuentras por menos de 99,35$.
El café se ha convertido en un valor refugio como el oro o los metales raros. Es una materia prima muy valiosa porque la demanda aumenta cada año y el inversor sabe que recuperará su dinero con beneficios. Con el beneficio añadido de que el café es un bien consumido por todos los estratos de la sociedad, mientras que la demanda de oro es mucho más sensible a la situación económica y política del momento.
Hace mucho tiempo que hemos venido hablando de la demanda de café a nivel mundial y de los problemas que tienen los productores para poder cubrirla. El café es la bebida más consumida solo superada por el agua, así que es natural que según aumenta la población aparezcan nuevos consumidores.
¿Te ha sorprendido la noticia? ¿Sabías que es muy común invertir dinero en producciones futuras de diversas materias primas?